Os escribimos para informaros de que hoy ha salido todo estupendamente: nos hemos concentrado unas 100 personas en los juzgados, hemos llenado la sala del juicio hasta los topes (con gente de pie en los pasillos) y la jueza -responsable de muchos de los autos de internamiento- ha flipado y se ha incomodado con la puesta en escena… El juicio se ha celebrado a pesar de que los policías no se presentaron, hemos podido responder a las tensas, manipuladoras y cortantes preguntas de la jueza. Hemos negado que hubiéramos insultado a los funcionarios de extranjería y hemos reivindicado la acción, afirmando que la repetiremos las veces que haga falta mientras continúen las detenciones racistas. Denunciamos en nuestras declaraciones las redadas, los secuestros racistas y la política migratoria en su conjunto. El fiscal, finalmente, ha pedido la libre absolución al no contar con los testimonios policiales. Y nos han absuelto. Y toda la sala ha comenzado a aplaudir y silbar y gritar.
Anteriormente atendimos a los medios de comunicación para señalar a la jueza Begoña Fernández (la que nos juzgaba) y a Francisco Javier Rodríguez Luengos como lxs dos que más agresivos son en cuestiones migratorias en Oviedo.