Goethe en Dachau

Rost, Nico

Editorial: Contraescritura editorial

ISBN: 9788494412134

Publicación: 2016

Nº de páginas: 344

Precio: 22,00 €.

Nico Rost entró en Dachau con un absceso en la pierna por lo que ingresó directamente en la en-
fermería. Gracias a que la biblioteca del Campo contaba con más de 13.000 volúmenes, pudo leer
a Goethe, los hermanos Friedrich y August von Schlegel, Hölderlin y Schopenhauer. También a
Rousseau, Silvio Pellico, Franz Grillparzer, August Strindberg y Jean Racine.
Escribió. Escribió sobre sus experiencias en la Guerra Civil Española, su papel como opositor al
fascismo desde la intelectualidad y que “llevar este diario bajo las condiciones dadas era una tarea
arriesgada que sólo se pudo lleva a cabo con la ayuda de algunos amigos”.
Goethe en Dachau es un diario pero se aleja de otros testimonios del sistema concentracionario nazi
en tanto que se centra en recoger las discusiones y reflexiones filosóficas, políticas,... convirtiéndose
en ejemplo de cómo la cultura puede salvar a un hombre del infierno que le rodea. Por otro lado, el
valor de su testimonio es incalculable en tanto que es uno de los pocos que no se plasmó a posteriori
sino que fue elaborado in situ. Goethe en Dachau es, además, una defensa tranquila de la grandeza
de la cultura alemana frente a la barbarie nazi.
El emocionante prólogo de Goethe en Dachau es obra de su amiga y escritora Anna Seghers.
La primera edición en español cuentan con un epílogo inédito de Rosa Toran, doctora en Historia y
Secretaría de archivos y publicaciones de la Amical Mauthausen y otros campos y de todas las vícti-
mas del nazismo en España, centrado en la experiencia de los 604 españoles que fueron deportados
a Dachau. La tercera, recupera el texto de Rost de su regreso al campo en 1955.

Nico Rost nació en los Países Bajos en 1896. Entre los años 1923 y 1933 vivió en Berlín, donde de-
sarrolló su carrera como escritor, periodista y traductor. Tradujo, entre otros, a Joseph Roth, Ernest
Hemingway o Alfred Döblin.
En febrero de 1933, cuando Hitler aún no había cumplido un mes como Canciller, fue encarcelado
durante tres semanas en el Campo de concentración de Oranienburg, una de las primeras instalacio-
nes de detención nazi ubicada en una fábrica abandonada. A su salida, Rost se instaló en Bruselas.
Cuando estalló la guerra civil, viajó a España primero como reportero. Esta primera estancia le llevó
a entrevistar, entre otros, a Dolores Ibárruri. Su segunda visita sería como invitado al II Congreso de
Escritores en Defensa de la Cultura.
Al acabar la contienda, regresó a Bélgica. Nico Rost trabajó a partir de entonces con varios seudóni-
mos pero eso no le libró de la persecución nazi. En 1943 fue arrestado y encarcelado en la prisión de
Scheveningen, de allí fue trasladado a Vught y finalmente al Campo de concentración de Dachau, de
donde no salió hasta la liberación.
El gobierno de Berlín oriental ofreció a Rost la dirección de los archivos literarios de la RDA, trabajo
que compaginó con la elaboración de la biografía de Otto Grotewohl que acabó por no publicarse
debido a las desaveniencias entre ambos. Tras varios cambios de gobierno, Nico Rost decidió aban-
donar Alemania y dedicarse al Comité Internacional de Dachau y la construcción del Memorial en
el KZ Dachau.