La leyenda roja

Denise Ucelay-Maragnès

Editorial: Lobo Sapiens.S.L.

ISBN: 9788492438433

Publicación: 2011

Nº de páginas: 288

Precio: 15,00 €.

«Dudo que los centenares de cubanos que vinieron a luchar por la República española tuvieran en cuenta las palabras de Cyrano de Bergerac: “J'ai decidé d´être admirable, en tout et pour tout”. Pero, lo cierto es que la decisión de centenares de cubanos de incorporarse a una lucha lejana geográficamente pero cercana en muchos otros sentidos, convierte a estos combatientes en esos frutos hermosos de nuestra especie que existen, han existido y existirán para dar fe de la nobleza de la raza humana.

Denise Urcelay-Maragnès ha elegido a aquellos cubanos que deciden acudir a la España sangrante del 36, para realizar una investigación exhaustiva de sus hombres y mujeres que puede ascender, según lo aquí desarrollado, a unos mil voluntarios. Esta galería de hombres realmente ilustres tiene su contrapunto en personajes como Rolando Masferrer, que tras haber sido brigadista, se incorpora entre los esbirros de las sucesivas dictaduras cubanas.

Desde su residencia en la caribeña isla de Guadalupe, la profesora Urcelay-Maragnès ha saltado de isla en isla, del continente americano al europeo, para seguir a estos combatientes en su viaje colectivo de ida y vuelta que no todos pudieron culminar. Pablo de la Torriente Brau y otros, dejaron su vida en tierra española, donde participaron en su defensa al tiempo que auscultaban el latido dificultoso de un país ahogado por las múltiples formas de la traición.

Denise que sabe de solidaridades internacionales por su propio padre, un vasco que vibraba por la causa republicana, atiende a una historia de Cuba que no siempre pasa a las líneas impresas. En rico entramado de organizaciones sociales, políticas y culturales donde hervía el puchero de la lucha contra la dictadura, la labor de “joven Cuba” destacará por delante del propio Partido Comunista Cubano y servirá de punto de partida para el núcleo más importante de voluntarios.
La Cuba que dejaban atrás los voluntarios no estaba exenta de conflictos. De hecho, muchos de ellos combatían en España lo que previamente habían peleado en Cuba a través de organizaciones de izquierda. Esto hace preguntar a la autora si “el combate de España no era un combate de sustitución?” La lucha por la liberación nacional, social y antimperialista que había sido asumida por muchos jóvenes cubanos organizados actúa de brasa para otros combates»

Mirta Nuñez Díaz-Balart